Qué negra es la Selva Negra
Aterrizamos en Basel y recogemos nuestro coche de alquiler, un Opel Corsa, buen maletero, negro, techo solar que se abre, deportivo total..... pinta bien. Primer olvido; el soporte del gps. Pues anda que vaya gracia tener que estar todo el rato sujetandole el cacharrito. Segunda pega: el coche deportivo total?, pero si cuando llego a los 100, ya estoy en 4000 revoluciones!!!, alaaaa, que nos adelantan todos. Deportivo de pega. Vaya, vaya. Nos ponemos en marcha, a dónde vamos?, tira hacia Totdnau, haber qué hay. La ruta más corta me indica autopistas de pago, mmmm, y me lleva por Suiza???, nooo, quita, quita. Vamos mejor por Francia, y no pagamos peajes. A los diez minutos de cruzar la frontera Alemana, comienza a llover. "Una nube, pronto pasará". Ya, una nube, y otra y veinte más. Y el cielo se volvió gris y caían chuzos de punta. Descartamos nuestra primera parada, una excursión en telesilla, como que no. Ponemos rumbo a Sankt Blassien, un pueblecito encantador, aunq...