Día Duit Éire

O lo que es lo mismo en español, hola Irlanda.
Primer desafío, súbete al coche: anda! por el otro lado. Segundo, intenta no cambiar la marcha con la mano derecha y tercero; cuidado con las rotondas, mira siempre quien viene por la derecha!!!. Por lo demás todo bien, me da la sensación cuando voy de copiloto de que nos vamos a comer todos los bordillos, pero al final y por suerte no es así.

Nuestro primer destino es Belfast, Irlanda del Norte. Eso es otro país, para el que no lo sepa y en cuanto llegamos los kilómetros han cambiado por millas y los euros por libras.



Y qué es lo primero que hay que hacer si llegas y ya ha anochecido?, correcto, ir a un buen pub a tomarse unas cervezas. The Empire estaba muy cerquita del hotel, en pleno barrio universitario. Buen ambiente, música en directo y mucha gente joven bailando en parejas, cosa que me chocó bastante.

A la mañana siguiente, hicimos el imprescindible tour del taxi negro por los murales de la ciudad. Digo lo de imprescindible porque al principio estaba reacia a hacerlo por nuestro nivel de inglés, pero el taxista fue muy majo y procuraba hablar despacio, aunque como buen irlandés cuando cogía carrerilla, no entendíamos nada.

Puertas del muro

Murales Protestantes

Primero nos llevó al lado protestante, nos explicó la historia de los murales, el muro de la paz, las puertas del muro que se cierran aún hoy en día de siete de la tarde a siete de la mañana. En el Muro de la Paz pudimos dejar nuestro mensaje.

Luego nos llevó al otro lado, al católico y, en general, desde un punto de vista bastante objetivo nos explicó lo que ellos llaman "the troubles" el conflicto desde ambos lados. Republicanos, católicos y voluntarios del IRA por un lado y unionistas y protestantes por otro.

Fue impactante ver también las banderas palestinas y murales como estos.
En ambos hay mártires y víctimas inocentes.

Banderas palestinas en el lado católico

Voluntarios del IRA fallecidos

Reivindicando libertad para terroristas españoles

Con el taxista, un genio

Ahora sólo queda que Belfast no se olvide de su pasado porque todavía lo tienen muy presente y miren hacia el futuro juntos.

Ayuntamiento de Belfast

Y hablando de historia, sabéis qué barquito se diseñó, se construyó y se botó desde los astilleros de Belfast?

Aun no adivináis?. El Titanic. Correcto.

Y como no todo va a ser ciudad pues una ruta por la costa del norte, va perfecta.
Aquí las carreteras son algo más estrechas, pero los irlandeses son pacientes, educados y muy amables.

La Giant's Causeway o Calzada del Gigante es algo muy parecido a lo que vimos en USA, una formación de roca basáltica que le da una curiosa forma. Creo que las fotos hablan por sí solas de lo hermoso del lugar.