Dando una vuelta por ahí...

Y tal y como está la cosa, el título del post viene que ni pintado. Porque irse de vacaciones con este panorama, es algo complicado. Flandes, esta región belga será nuestro próximo destino. Abarca prácticamente la mitad noroeste del país y en ella están las ciudades más importantes y las que visitaremos: Bruselas, Amberes, Gante y Brujas.

Nuestro vuelo low cost aterriza a su hora en el aeropuerto de Charleroi, y desde ahí cogemos ya los billetes de bus ida y vuelta para Bruselas. 22 € y 45 min después ya estamos en la estación Gare du Midi , donde cogeremos una línea de metro que nos lleve hasta el centro, muy cerquita de la Grand Place, la parada es Bourse.

Amanece con sol en Bruselas, contra todos los prognósticos y decidimos aprovechar nuestra suerte y salir a callejear de nuevo. Ponemos rumbo al barrio de Sablon y llegamos a la Plaza e iglesia del mismo nombre, allí todos los fines de semana se celebra un mercadillo de antigüedades.

Desde la estación central de Bruselas, nos despedimos de esta ciudad para poner rumbo a Gante. El trayecto dura unos 30 minutos, 8,5 € y lo primero que vemos al llegar es un enorme aparcamiento para bicicletas.

Nos despertamos temprano en Gante, para aprovechar el buen tiempo matinal que se prevé en Brujas. Tomamos unas últimas miradas a la ciudad que nos enganchó y subimos al tranvía que nos lleva a la estación de Gent St.Pieters. Trayecto de media hora escasa y 7,50€. Salimos de la estación y el buen tiempo nos anima a ir caminando hacia el hotel, con un plano muy cutre pero con nuestra intuición callejeando llegamos sin problemas, después de habernos recorrido varias de las calles principales de la ciudad y de habernos abierto las ganas de canales y chocolates con sus pequeños puentes y escaparates golosos.

Nuestro último día en Bélgica amanece en la ciudad de Brujas desde donde tomamos un eficaz tren belga que nos lleva hacia la capital, Bruselas. En la zona este de la ciudad se encuentra el barrio de la Unión Europea, llamado así porque aquí se centran todos los edificios administrativos y las sedes de los diferentes organismos de la Unión. El primero que vemos justo al salir por la boca de metro es, de hecho el más bonito de todos arquitectónicameente, el Berlaymont, sede de la Comisión Europea. Y justo enfrente el Consejo de la Unión Europea.

Una de las mejores maneras de disfrutar del verano, sin pasar mucho calor, y no aguantar colas playeras es hacer una buena ruta de senderismo y si el paisaje es de cuento, pues mucho mejor. Tendremos que ir hasta Galicia, al paraíso de las Rías Baixas y allí dirigirnos a Ribadumia. Allí comienza una de las rutas de senderismo más famosas de la comarca, la denomidada ruta "da pedra e da auga".